Entre la gran diversidad de terapias y enfoques para lograr el bienestar, la kinesiología surge como una disciplina que va más allá del simple estudio del movimiento del cuerpo humano. Es decir, es algo que no podemos limitar a lo que nos sugieren sus raíces etimológicas: «kinesis» (movimiento) y «logos» (estudio). Evidentemente, hablamos ahora de una ciencia compleja y multifacética que abarca la evaluación integral de la persona. Gracias a métodos específicos como el test kinesiológico, esta disciplina busca descubrir desequilibrios y problemas subyacentes que afectan la salud y el bienestar.

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¿Qué es la Kinesiología y para qué sirve?

En su forma más básica, la kinesiología es la ciencia que estudia el movimiento humano. Sin embargo, esta definición no captura la amplitud y la profundidad de lo que realmente implica esta disciplina en la actualidad. Más allá de analizar los movimientos físicos, la kinesiología se ha convertido en una terapia natural integrativa que considera al individuo como un todo interconectado.

Esta disciplina no solo evalúa el movimiento y las cadenas musculares, sino que también busca comprender las respuestas reflejas del cuerpo que condicionan su tono y funcionamiento general. En otras palabras, hablamos de un enfoque holístico que reconoce la relación entre los sistemas musculares, orgánicos y sistémicos y cómo interactúan para mantener la salud y la armonía.

Kinesiología integral y el test Kinesiológico

Dentro de la kinesiología, existe un enfoque conocido como la «kinesiología integral«. Su desarrollo ha estado apoyado en la profundización de la comprensión de cómo nuestro entorno, nuestras emociones y nuestros hábitos influyen en nuestra salud. La kinesiología integral busca asociaciones y conexiones que antes podrían haber pasado desapercibidas. Esta aproximación tiene fundamento en la utilización del test kinesiológico.

El test kinesiológico es una herramienta esencial en la práctica de la kinesiología. Este procedimiento se soporta en la afirmación de que el cuerpo humano es un sistema interconectado, y cualquier desequilibrio o problema en una parte del cuerpo puede manifestarse en forma de cambios en la respuesta muscular en otras partes. Durante este proceso, el kinesiólogo realiza preguntas específicas y utiliza el test muscular para evaluar las respuestas del cuerpo.

La técnica del test kinesiológico implica que el paciente mantenga una posición específica mientras el kinesiólogo realiza una serie de preguntas o aplicaciones de presión. La respuesta muscular del paciente puede ser un acortamiento o debilitamiento momentáneo de un músculo. Tal situación se interpreta como una indicación de desequilibrios internos o problemas subyacentes.

De allí, que la interpretación del test sea una habilidad clave en la práctica de la kinesiología. Aunque teóricamente es comparable a la detección de mentiras en un polígrafo, el test kinesiológico es mucho más sutil y complejo. Las respuestas musculares no se limitan a una simple interpretación sobre verdad o mentira; en cambio, indican desequilibrios energéticos y disfunciones en el cuerpo.

Es importante destacar que el test kinesiológico depende en gran medida del profesional que lo realiza. En este sentido, la habilidad, la experiencia y la sensibilidad del kinesiólogo influyen en la precisión y la interpretación de los resultados. Por eso, el test kinesiológico puede no ser completamente formalizado y reproducido en todos los entornos clínicos.

¿Qué es la kinesiología holística?

Asimismo, en el marco de estos enfoques terapéuticos, encontramos la kinesiología holística, también conocida como physioenergetik. Esta es una técnica de diagnóstico y tratamiento que va más allá de los límites de la práctica sanitaria formal. El recurso básico de esta disciplina es el test muscular Arm Reflex (Reflejo del Brazo), introducido por Raphael Van Assche. Esta prueba no solo brinda información precisa sobre los desequilibrios del cuerpo, sino que también guía hacia el tratamiento más adecuado.

La palabra «holística», derivada del griego «holos», que significa «todo». En el ámbito de la medicina natural, este término abarca la noción de que el cuerpo no es solo la suma de sus partes, sino una entidad unificada. Por tanto, cada aspecto, ya sea físico, emocional o energético, contribuye a la totalidad del individuo. Dicho enfoque considera vital analizar e integrar todos los componentes de la persona para restaurar el equilibrio y la salud.

El test Arm Reflex

El test Arm Reflex (AR) es una prueba que busca evaluar la respuesta del Sistema Nervioso Vegetativo ante diferentes estímulos. Mediante la cadena muscular de los brazos, el AR proporciona información valiosa sobre el esquema corporal y la energía estática. Esto permite revelar los desequilibrios y las disfunciones en el cuerpo.

Al respecto, el principio fundamental del AR es que una cadena muscular que funciona correctamente mostrará debilidad en respuesta a un estímulo que afecta negativamente al cuerpo, lo que lleva a una inhibición neuromuscular. Esta técnica permite al kinesiólogo evaluar los cambios en el tono de las cadenas musculares anteriores y posteriores, así como en la musculatura de la espalda y del cuerpo en general. En última instancia, el AR proporciona una amplia gama de información sobre los procesos internos de la persona.

Los 4 campos de la kinesiología holística

La kinesiología holística considera cuatro campos de estudio interrelacionados para evaluar y tratar desequilibrios:

  • Campo energético: En efecto, los desequilibrios energéticos o de información pueden ser consecuencia de diversas causas: radiaciones electromagnéticas, desajustes en las glándulas centrales, problemas en el cerebelo o desequilibrios energéticos propios. Tratamientos como la auriculoterapia, la cromoterapia, la digitopuntura, la acupuntura y el Reiki son utilizadas para abordar estos problemas.
  • Químico: Para tratar desequilibrios químico-orgánicos y químico-nutricionales, la kinesiología holística identifica deficiencias y focaliza en la recuperación de la homeostasis mediante el uso de productos naturales y complementos dietéticos. Además, se aborda la eliminación de toxinas y se considera la salud de la flora intestinal.
  • Campo emocional: En casos de desequilibrios emocionales, se investiga si la causa es una carencia de nutrientes en el sistema nervioso, una emoción no procesada arraigada en el inconsciente o un trauma del pasado. Técnicas como las flores de Bach, la Programación Neurolingüística (PNL), visualizaciones, EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimiento Ocular) o tapping son utilizadas para el tratamiento.
  • Estructural: Si el desequilibrio es de naturaleza estructural, puede deberse a bloqueos articulares, contracturas musculares o espasmos viscerales. En tales casos el terapeuta recurre a técnicas manuales para restaurar la normalidad en la estructura. Para ello, considera factores como los desequilibrios posturales y la función del sistema nervioso y circulatorio.

Un poco de historia

Raphael Van Assche, fisioterapeuta y osteópata belga, introdujo en 1980 el concepto del AR mientras trabajaba en la Clínica Buchinger en la Costa del Sol, España. Observó cómo la respuesta que transmitían los brazos de una paciente estaba intrínsecamente ligada a sus emociones.

Esto la llevó a liberar una emoción atrapada. Al realizar pruebas en los músculos del psoas, notó cambios de tono relacionados con la experiencia emocional que había desencadenado la dolencia. Estos descubrimientos y sus propuestas de tratamientos convierten a Van Assche en el pionero de la kinesiología holística.

La disciplina que nos ocupa amplió los horizontes de la kinesiología aplicada al integrar los campos energéticos y de información ya citados en su evaluación. A diferencia del enfoque aplicado, centrado en músculos fásicos, la vertiente holística trabaja con cadenas y músculos no fásicos.

El origen de tus dolencias puede estar en tus emociones

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